En joyería, la innovación contempla el uso de materiales no tradicionales para crear piezas diferentes, modernas y capaces de expandir los límites de expresión de las joyas. Este campo de nuevas posibilidades se extiende cada vez más, y ya se emplea una diversidad de materiales como plástico, tejidos, cerámica o papel, entre muchos otros. Para este tipo de materiales también es pertinente considerar los impactos sociales y ambientales derivados de su origen y manipulación para, después, buscar las opciones más sostenibles.
Los bioplásticos como opción de joyería sostenible
La utilización de materiales alternativos siempre ha estado presente en la historia de la joyería y, si bien es cierto que el bioplástico tuvo su papel vinculado a la joyería mucho antes de la aparición del plástico sintético, no ha sido hasta la irrupción de la fabricación digital y el creciente interés por el uso de nuevos materiales sostenibles que ha vuelto a ganar protagonismo.
Pero, ¿qué es el bioplástico?
El bioplástico es un tipo de plástico que, a diferencia del plástico sintético, que proviene de recursos fósiles finitos como el petróleo, se fabrica a partir de fuentes naturales renovables, como el almidón de trigo o la fécula de patata, entre otros muchos. En la mayoría de los casos, los bioplásticos también son biodegradables; esto significa que una vez se han utilizado, bajo determinadas condiciones ambientales y en contacto con microorganismos, se descomponen en nutrientes que vuelven a la tierra.
Foto y texto: Paula Waters
Para ampliar información, consulta el apartado dedicado a nuevos materiales de nuestra guía La joyería responsable.